jueves, 25 de junio de 2009

Te pido o no te pido


Te esperado casi una semana para que me contestes este mail. No sabes la cólera que tengo que, todos los días como un tonto, pagaba mi 50 céntimos y me sentaba a esperar algún mail tuyo en mi bandeja de entrada. Ahora me escribes diciéndome que has tenido mil cosas más importantes que hacer en la semana: aceptar la invitación de ese mequetrefe que te hace guiños. Nunca pensé que me dirías eso, y que me dolería tanto en donde ya sabes: mi idiota corazón.
Ayer te escribí un mail totalmente salido de mi, inconsciente – aunque sabia muy bien lo que escribía- donde descargué todo mi odio por ti, y por todas tus mentiras, todas esas ilusiones que has creado en mi, los malditos mail donde me dices que me quieres y que sea un poco paciente y por todo lo inútil que se ha convertido esta relación.
En estos días he hecho cosas disparatadas: averiguar el número de tu celular, la dirección de tu casa y, porsiacaso si tenias enamorado. Créeme lo logré con éxito todo, menos lo del enamorado.
Ayer, antes de escribirte este mail, fui a buscarte a tu casa con la dirección que me había dado gentilmente tu amiguísima que ahorita ya he olvidado su nombre. Y llegué a tu casa – muy bonito de antemano- , toque la puerta convertido en un manojo de nervios e incapaz de hablar algo a quién salía. Salió tu mamá y supuse que era ella, esos mismos dientecitos de conejos, esos mismo ojazos; sí era ella. Tú dirás que pregunté por ti, pero no me atreví, busque una excusa y fingí que buscaba a otra persona, y tu madre muy gentil, me dijo que no había nadie con el nombre que había preguntado. Y como todo fue un fiasco de ir a buscarte, te llamé a tu celular, ¿pero sabes quién me contestó?: Tu hermano. Sí, tu hermano me contesto levantando la voz con una prepotencia que jamás imagine que fuera así mi futuro cuñadito, y eso que yo hable con voz fingida, aflautada bajando el tono de mi voz pero me salió que parecía la voz de un maricón. Ese día fue el peor, no logré nada, y ahora me tienes aquí respondiéndote tu incomprensible mail. Me dices que tenias trabajos y te pasaste horas de horas sentada frente a la computadora buscando tus trabajos en el internet, y no te diste un minuto para escribirme, pero sí tuviste tiempo para irte a ver una película con ese desparpajo de hombre; eso sí que es amor, mucho amor.
No te escribo para recriminarte nada – aunque ya lo hice -, pero me duele mucho que me escribas, y me digas que me quieres, cuando te has olvidado de mi por 4 días, ¿no te parece demasiado tiempo?, seguro que no, pero para mí, fue el más largo y el mas tenso; que cada día me parecía estar dando un parcial de la universidad de los cuales todos salía desaprobado. Mientras tú no me escribías, yo te escribía todos los días cosas que me salían de un tirón, quizá incomprensibles; pero llena de amor, solo para ti, como tú lo sabes.
Hay una cosa me preocupa, ¿sabes de la apuesta, no? Tengo un mes para llenarme de valentía y pedirte que seas mi enamorada. Ahorita lo estoy dudando, creo que tengo que juntar mi plata y pagar nomás.

Pdta.: No creo que pueda juntar dinero para pagar mi apuesta. Pero sería lindo tomarte de la mano y que todos me envidien. Me voy armar de valor, seguro que en estos días te digo que seas mi enamorada.

lunes, 22 de junio de 2009

¿Feliz día Papá?


Feliz día papá, qué tal, cómo la estas pasando. Seguro que sentado estas pensando por qué tus hijos no han ido a visitarte. Seguro que en la mañana despertaste y creíste que alguno de tus hijos iban a visitarte, seguro que sí.
Ayer, sábado, yo también estuve pensando en el patio de mi casa, ¿aún recuerdas el patio?, seguro que no. Estuve sentado mirando el cielo azul, tan claro y purísimo. Y pensé si tú también mirabas ese cielo, y te preguntabas si irían a saludarte tus hijos. Pero sabias que no, absolutamente nadie se tomaría la molestia de coger el teléfono, marcar tu número y esperar tu voz.
Me pongo en tu posición de padre, seguro entristecido, sumido en esa pesadumbre de muerte de que en tu día nadie se haya molestado en llamarte; menos ir a visitarte. Pero lamentablemente aún no soy padre, y nunca estaré en tus zapatos. Mi madre me fatiga diciéndome que el único que va juzgarte es Dios, solamente él. Pero qué se cree él para tomarse la justicia, y no nosotros los que sufrimos mucho con tu falta de solidaridad, tu nulo cariño hacia nosotros, esa extraña forma de querer solo cuando te visitábamos. Pues, si Dios será el único que te va juzgar, que te juzgue bien sin miramientos, con su brazo duro, ese brazo castigador, inmisericorde. No sé tú, pero yo no tengo ni tendré las ganas de verte, a pesar de imaginarte sentado en esa silla de ruedas que, cada vez que te veo, lo único que me provoca es llorar de lástima. No llorar por verte desvalido, sino de pena de ver a un hombre que antes era un animal que repartía patadas, puñetazos, cabezazos a una mujer que lo único que te ofreció fue un puñado de hijos inocentes de tu barbarie; y ahora eres nada. Simplemente que debes ser ayudado a mover la cuchara, un desvalido sin fuerzas para poder articular monosílabos, un hombre que no puede controlar sus esfínteres, que si se para se va de bruces contra el piso; sí, ves, pura lástima. Me pregunto en este sábado de junio a pocas horas de ser El Día del Padre: ¿Por dónde anda tu mente? ¿Por qué lugares de tu mente buscas cariño de alguien de tus hijos? ¿Por donde…?
Mi madre por la noche me ha dicho que mañana, domingo, te llame en la mañana, no tan temprano, pero sí que te llame. Me dice que por respeto te llame, te pregunte cómo estas, si se sabemos muy bien que nadas de mal en peor ¿para eso llamarte? Mi madre me recrimina que te juzgue así, que no tenga una microscópica parte de mi algún cariño hacia ti, que me rehúse a darte un saludo corto por el teléfono, sí pues, me resisto saber de ti como tú resististe a saber que tenias hijos que necesitan de ti.

Hoy por la mañana cogí el teléfono y marqué tu número. Esperé que timbrará el teléfono, alguien por el otro lado me contesto: era tu hermana, - prefiero no llamarla tía-.
Dijo varias aló, aló, aló; pero no articulé ninguna silaba, en el acto corte la llamada, y supuse que ya habías olvidado que hoy era tu día y seguías durmiendo plácidamente a las 8 de la mañana de este domingo.

jueves, 18 de junio de 2009

Pídeme que sea tu enamorado

Pídeme que sea tu enamorado




Me da pena que me mires de reojo y no te atrevas a mirarme de frente. Hoy te has cruzado conmigo por las gradas que dan hacia el curso que, felizmente, compartimos: Psicología.
Gracias a una divina providencia, creo, no nos ha tocado estar cerca. Tú has formado tu grupo con las mismas chicas, las de caritas alegres, las que no matan ni una mosca, sí con ellas. Hemos hecho un tema absurdo, tan absurdo, de cómo realzar o levantar la autoestima. Toda la hora te estado mirando de frente. Mi amigo, con el que siempre me ves, a cada rato me ha dicho que deje de mirarte porque es demasiado evidente, pero yo le he dicho que no te miro porque estoy tan embelesado contigo, sino, quiero hacerte sentir cómo me gusta amarte sin reproches ni vergüenzas. Sí pues, me los has vuelto a repetir que ya no te mire así, que deje de hacerte esas sonrisitas sardónicas y mueva la cabeza de un lado para el otro para volverme a convencer que me amas, aunque nunca me lo has dicho de frente, y siempre valiéndote del internet, y todas esas soporíferas tardes que pago mis 50 céntimos para esperar como un tonto que me escribas y me digas: “lindo me has escrito, ayer”. Pues eso sí que no me gusta. Siempre los mismo, ayer, hoy y mañana te escribiré bonito porque te lo mereces mas que a nadie en el mundo, así mi mamá se resienta toda una vida conmigo y no me incluya en su testamento; siempre te escribiré bonito
Ayer, cuando salías del baño sola quise acercarme a ti, decirte por lo menos hola, cómo estas; pero sabes que yo también no me atrevo a hablarte pero mirarte, escribirte mails, mandarte un poemita mal hecho pero con harto cariño, en eso si soy atrevido. “la ignorancia es atrevida”, hoy me has escrito en uno de tus mails, que lindo a sido leer esa frasecita en voz alta. Si pues, me prefiero ignorante y seguir siendo un atrevido contigo, para poder amarte con miraditas coquetas, risitas burlonas; pues seré un enamorado atrevido hasta el uñero.
Ahora estoy tratando de escribirte algo bonito para mañana para que puedas leerlo, pero créeme, no me sale nada bien, he querido escribirte – mejor dicho contarte - , lo que leí el otro día en el internet sobre cómo animales solían demostrar sus formas de afecto, si así se puede llamar eso, y lo único que he logrado ser el único animal enfermo que cada día muere por ti. Por esos dientecitos de conejo y ese rubor que me gusta cuando te pones rojita; sí, por esas cositas insignificantes, me gustas tanto.
Mi amigo ya me ha puesto fecha para pedirte que seas mi enamorada, pero ni de vainas me voy a atrever a decirte algo, tu lo sabes muy bien, pero ahora estoy comprometido en pedirte en un mes; ojala sea eterno ese mes, porque ni ha balas te voy a pedir que seas mi enamorada.

Pdta. Eso de que ni a balas te voy a pedir que seas mí enamorada esta en duda, quién sabe. Un día antes de cumplir el mes, tú y yo, estamos juntos.

viernes, 12 de junio de 2009

Cuando la calma se convierte en tormenta



Los días posteriores al enfrentamiento en Bagua de efectivos del orden y nativos, a ocasioando una serie de debates políticos y periodísticos, que han demostrado que este gobierno y , en especial este aprista, caminaa paso de tortuga.


Es que acaso este país no merece un poco de respeto por parte del autoritario gobierno aprista; o es que acaso este país se ha sumido en el letargo de la insensibilidad. Muchos medios - a simple vista-, tienen puntos de vista contrariados, unos defienden al gobierno, como es el caso de TV Perú que, en los últimos días, a tenido una lucha desmedida por la defensa del aprismo. Mientras otros medios que podría decir que en verdad han ejercido un verdadero poder de la verdad, y no haber caido por la seducción del poder aprista.


Esto me conlleva a decir que, aunque duela a todos los peruanos, somos un país intolerante, insencible ,donde todos nos damos de puñaladas, nos matamos entre hermanos de diferentes razas, donde llamarse nacionalista es azuzar a un grupo de indigenas a asesinar policias, donde un gobierno envia policias desarmados a la muerte, sin armas, sin defensa...


La pausa de 9 días que se ha dado por la controvertida ley1090, es acaso una tregua, para despues enfrascarnos en una lucha encarnizada, donde gremios de trabajadores, estudiantes universitarios, maestros, empleados públicos salgan a las calles y a viva voz, quizá con palos y piedras, nos volvamos a destruir. ¿Acaso hay derecho?


Ahora solo queda esperar que nuestro"bendito" gobierno solucione los problemas generados, y que no se de esa pérdida de tiempo que ha perjudicado al nuestro país, y que por el fortalecimiemto de nuestro país: político, económico, social. Este gobierno tenga dos dedos de frente y sepá ser muy cauto y menos irresponsable.